martes, 29 de abril de 2008

ADICCIÓN

Necesidad de tenerte en mis manos,
Cual paloma risueña, pequeña, siempre frágil.
Para quererte, para adorarte,
Cual bandera flameante en el mástil.

Vocación, de querer beber de tus labios,
Cual cruel adicción, despiadada e inevitable.
Como un gladiolo marchitando frío, con el daño,
Como el petirrojo del vuelo incuestionable.

Deseo de soñar algo eterno y junto a ti,
Sin culpa ni resentimiento por tal egoísmo.
Porque tu amor está conmigo, es quien me mueve
Como para hacer tuyo el cielo mismo.

Necesidad de vivir en tu regazo, con tu amparo, tu consuelo,
Cual otoño moribundo, gélido y cálido, frágil y tierno;
Que se consume en tus dedos, recorriendo todo tu cuerpo,
Para decir cuánto te amo, para demostrarte lo que siento.

Voluntad, feroz y ufana voluntad, siempre tan mía,
Que carcome mi sentido común, tan mancillado.
Porque me mueve hacia esa sensación nerviosa:El dolor de saber y de sentir cuánto te amo.

No hay comentarios.: