martes, 29 de abril de 2008

MEDIOCRIDAD

Qué mediocre es tu silencio, cuando callas,
Cuando duermes, cuando respiras, cuando amas.
Tan mediocre que lastimas ese orgullo mío
Que te ama, con entrega y que, con dulzura, apagas.

Qué mediocre es tu ataque, cuando gritas,
Cuando pegas, cuando matas, cuando hieres.
Casi perfecto, pero equívoco, injusto y despiadado,
Que sangran mis pensamientos si me quieres.

Qué mediocre es tu deseo, si me llamas,
Si me abrazas, si me tienes en tus manos.
Tan mediocre que sucumben mis ilusiones
Cuando gritas silente en mis oídos, un “te amo”.

Qué mediocre es mi creencia, cuando me dices
Que vale la pena ser tu aire, tu tierra, tu fuego,
Si el amor que tengo para darte, lo destruyes
Con la mediocridad de un simple “hasta luego”.

Qué mediocre se vuelven tus pensamientos
Cuando crees que soy tuyo, que me tienes contigo.
Si la tristeza de tu andar quema este cuerpo frío...
Qué mediocre caminar, casi muerto, casi vivo.

Qué mediocre es tu esperanza, de que seré mejor,
Si no tienes paciencia para escucharme, para ser
Un poco de lo que soy contigo, aunque sea por piedad,
En tanto tiempo que llevo cambiando para crecer.

Qué mediocre es tu orgullo, cuando gimes, cuando estás,
Cuando te ausentas, cuando empujas mi felicidad.
Tan mediocre que ni tu calma, ni tu fortaleza,
Ni mis deseos, amor y cariño te dieron esa tranquilidad.

Qué mediocre es tu idea de amor eterno, de amor compasivo,
Si nada te asusta, si nada te hiere, ni te hace doler.
Tan mediocre es tu cariño, que asesina mi fe
Y me vuelve sólo un niño al que amas sin querer.

No hay comentarios.: